Cómo enseñar a un perro a traer la pelota

Existen muchos juegos que podemos practicar con nuestros perros, pero sin duda cómo enseñar a un perro a traer la pelota es uno de los más completos y divertidos tanto para el perro como para nosotros. Al margen de jugar con él y reforzar nuestro vínculo afectivo, hacen ejercicio, liberan energía, lo pasan en grande y estamos practicando diferentes ejercicios de obediencia. Y aparte es un juego idóneo tanto para cachorros como para perros adultos.


Te interesa leer:

La importancia del juego para tu perro


A continuación os daremos una serie de pautas y consejos muy efectivos de cómo enseñar a un perro a buscar la pelota, a traerla y a soltarla en nuestra mano cuando se lo pidamos, para poder volver a tirársela. Contar con el material necesario, conocer las fases del entrenamiento y ser consciente de los errores típicos a evitar son claves para conseguir entrenar a tu perro con éxito para realizar este completo juego.

Material necesario

  • Lo primero de todo es contar con una pelota de buena calidad y que resulte cómoda. Así evitarás que tu perro la destroce en poco tiempo y corra el riesgo de tragarse los trocitos. Es muy importante evitar utilizar pelotas de tenis, ya que dañan su dentadura. Nos hemos centrado en la pelota, pero estas pautas son igualmente aplicables a muchos otros juguetes: un fresbee, un kong, una cuerda de nudos para perros, etc. Ya sabemos que cada perro tiene sus objetos preferidos. Incluso sería válido un juguete que haga ruido (ese ruido a veces es clave para que el perro identifique su sonido con el objeto, para llamarle suficientemente la atención y para que realice las acciones que se requieren).

  • Una correa lo suficientemente larga como para que el animal pueda moverse sin restricciones ni llevarse un tirón en el cuello.
  • Un collar, que debe ser cómodo y de buena calidad también.
  • También necesitarás golosinas caninas y snacks para reforzarle positivamente cuando lo haga bien durante todo el juego, y también para atraerlo hacia ti si está sobreestimulado o está muy distraído.

Errores frecuentes

– Entrenar con el perro suelto

La correa es muy importante en las primeras fases del aprendizaje de este juego porque sin ella el perro se puede distraer con olores, con otros perros o con otros estímulos. Tienes que trabajar con una correa larga para ayudarle y para guiarle a traer la pelota.

– Jugar sin límite de tiempo

Esto es como cualquier deporte para nosotros: si al principio nos damos una paliza o lo alargamos mucho sin tener un hábito, perdemos la motivación. Por eso hay que empezar poco a poco y aumentar el tiempo de juego progresivamente.

– Jugar sin motivación y con poca intensidad

Hay que evitar el aburrimiento del animal mostrándonos nosotros mismos motivados y lanzando la pelota con energía. Hay que moverse de una manera enérgica y generar el interés necesario en el perro.

– Ir detrás del perro y quitarle la pelota de la boca

Nunca persigas a un perro cuando tenga un juguete en la boca. Durante el aprendizaje, es raro que te lo dé a la primera. Pero tampoco conviene agobiarles y mucho menos intentar sacárselo a la fuerza de la boca. Debemos enseñarles a soltar el objeto o a intercambiarlo por un premio.

– Elegir un momento o un lugar inapropiado

Para empezar a jugar con tu perro nunca elijas un momento de descanso del perro, tras sus comidas, un día de mucho calor o de mucha lluvia, ni tampoco un momento que esté muy sobreestimulado, ya que tiene que estar animado y dispuesto a jugar contigo. Una vez que haya aprendido a traer la pelota, es posible y muy divertido que juegue con más perros a perseguirla y a traértela para que se la tires de nuevo.

Tampoco escojas un lugar nuevo, con demasiados estímulos (pájaros, palomas, gatos, etc) o con nuevos olores, pues todo esto hará que no esté centrado en ti ni mucho menos en traer la pelota.

Etapas para enseñar a un perro a traer la pelota

1. Elegir una palabra para que traiga la pelota, familiarizarlo con la pelota y elegir un lugar tranquilo

Tenemos que elegir una palabra que será la que siempre repetiremos para que nos traiga la pelota, por ejemplo «trae«.

Si la pelota es nueva, para que se familiarice con la misma hay que dejarle jugar con ella unos días en su propio entorno antes de empezar el entrenamiento. De esta manera todo el juego será mucho más natural y fluido.

Enseñarle a traer la pelota será muy difícil si el perro está rodeado de estímulos externos: otros perros, animales de otras especies, niños corriendo, etc, pues se distraerá o se pondrá nervioso y nunca aprenderá el objetivo del juego. Un jardín, un parque pequeño, una zona de campo apartada, una terraza en casa, una cancha vacía de fútbol o cualquier lugar tranquilo, es donde habrá que empezar a jugar para que nuestro perro este 100% atento al juego y para que podamos ser su único foco de atención.

2. Traer la pelota con una correa larga y soltarla en nuestra mano cuando se lo pidamos

  • Colocar la correa larga a tu perro y sujétala con la mano.
  • Enseñaremos la pelota a nuestro perro y la moveremos un poco, provocándole para que la coja pero sin dejar que lo haga. Entonces la lanzaremos lejos y pronunciaremos la palabra «busca» con un gesto concreto con el brazo.

Una vez que tu perro haya sido premiado varias veces y tenga dominado el ejercicio de buscar, le pediremos que permanezca «quieto» (para ello tendremos que habérselo enseñado) o también podemos pedirle que se «siente» si no sabe quedarse quieto. Esto evitará que esté extremadamente ansioso por jugar y le ayudará a tener más autocontrol en este juego. Una vez que se quede quieto o que se siente entonces lanzaremos la pelota lejos y le pediremos que la busque con el gesto con el brazo.

  • En el momento en que tu perro coja la pelota con la boca, hay que indicarle que nos la traiga pronunciando la palabra «trae» y hay que ayudarlo a venir hacia nosotros con la correa larga. En este paso es muy importante no agobiar al perro pues de lo contrario será muy contraproducente para el aprendizaje del ejercicio.
  • Luego le enseñamos la golosina canina para que suelte la pelota en nuestra mano a la vez que pronunciamos «suelta». A continuación, le reforzaremos positivamente con la golosina, con muchas caricias y con palabras afectuosas (como «buen chico», «buena», «muy bien») para que asocie que soltar la pelota es algo bueno que tiene recompensa. Si el perro no suelta la pelota, no debemos intentar quitársela porque entonces entenderá que está haciendo bien mordiéndola fuerte. Debemos insistir una y otra vez hasta que suelte la pelota, sin perder la calma y con mucha paciencia.
  • Recuperaremos la pelota para tirársela de nuevo.

Y así sucesivamente hacer este ejercicio hasta que tu perro te traiga la pelota sin que tengas que ayudarlo con la correa larga. Simplemente hay que tener un poco de paciencia y ser constantes, practicando todos los días un ratito. Debemos tirarle la pelota varias veces pero sin excedernos (unas 5 veces por sesión de juego), dejándole tiempo entre cada lanzamiento para que descanse y la mordisquee un poco, que disfrute de ella.

Una vez que haya aprendido este ejercicio, le dejaremos durante un tiempo más la correa larga en el suelo sin cogerla nosotros, por si falla ayudarle a venir hacia nosotros con la correa larga.

3. Traer la pelota sin correa larga

Una vez dominada la etapa anterior probaremos sin correa. Si trae la pelota, seguiremos jugando. Pero si no, hay que parar para demostrarle que ese no es el camino, y volveremos a la etapa 2 con la correa larga. Así poco a poco hasta que realice todo el juego por su propia voluntad y al instante.

Conclusión

Siguiendo estas pautas de cómo enseñar a tu perro a traer la pelota podréis disfrutar de un juego divertido a la vez que fortalecéis el vínculo. Poco a poco con paciencia y mucha motivación te será más fácil que entienda las indicaciones y él mismo será quien te insista a jugar llevándote la pelota a las manos o acercándola con el hocico.

En cualquier caso, siempre podéis contactar con NOBLECAN para que os ayudemos a realizar este juego con vuestro perro o para obtener cualquier otra información.

Juan Carlos Castilla Elena

Fundador y director de NOBLECAN Adiestramiento canino, adiestrador, educador canino titulado con nº de licencia 08/13, etólogo canino, juez canino y miembro federado nº 919/2017 de la Asociación Nacional de Adiestradores Caninos Profesionales (ANACP).